NIAFFS'18: BROTHERHOOD OF BLADES II: THE INFERNAL BATTLEFIELD (2017)


Volver a las raíces es algo habitual en el cine hongkonés, donde el cine de Kung Fu intenta sobrevivir más allá de la televisión o de producciones de la China Continental sin mayor repercusión que la más local. Todos los años aparece un puñado de películas que recuperan antiguas épocas llenas de honor y espadas y el pasado 2017 una de ellas fue Brotherhood of Blades II: The Infernal Battlefield, de nuevo con Lu Yang como director. Apoyándose de nuevo en un reparto sólido y una ambientación soberbia, junto a una dirección igualmente clásica y sosegada, tenemos una película muy recomendada alejada de otros films que, siendo similares, tienen una dirección más moderna que usa los efectos digitales como algo más que una herramienta para secuencias espectaculares. Una propuesta muy interesante que ha conseguido incluso ganar el premio a la Mejor Coreografía de Acción en el Golden Horse Film Festival tras conseguir otras nominaciones en éste y otros festivales.

Lu Yang coloca la cámara en los mejores sitios para dar esa sensación de estar viendo obras pictóricas gracias al ritmo pausado y a la riqueza visual a la hora de elaborar cada plano. Los momentos de más acción están igualmente bien rodados, con planos abiertos y sin demasiados movimientos innecesarios. También es cierto que la propia historia requiere esta cadencia narrativa, e incluso las coreografías de Sang Ling (Red Cliff: Part 2) mantienen una armonía con todo el conjunto. Intrigas de las más clásicas con un excelente Chang Chen (The Grandmaster), sobrio pero perfecto como protagonista. Se aleja así del wuxia actual, o neo-wuxia, producciones orientadas a la espectacularidad visual del 3D con Tsui Hark a la cabeza con, por ejemplo, su Detective Dee que va ya por la tercera entrega (aunque también está rodada en este formato, claro) Aquí todo funciona para la historia, avanzando con buenos giros de guion, tomándose a sí misma en serio pero sin pasarse. De esta forma disfrutamos de una historia sólida con estupendas ejecuciones coreográficas rodadas con buen pulso. No es una obra cumbre del género, pero si se mantiene por encima de la media actual y gran parte se debe al propio protagonista, Chang Chen, muy sobrio por requerimientos del papel.



Por otro lado el guion intenta plasmar la sociedad de la época enriqueciendo así la propia ambientación ya que no vale sólo con rodar en parajes naturales y estupendos decorados para transportarnos a la Dinastía Ming, es necesario mostrar diferentes facetas de la sociedad para lograr entender a los diferentes personajes y su forma de pensar, algo que de nuevo es un acierto. Siempre digo que al cine de artes marciales hay que pedirle como mínimo, buenas escenas de lucha, pero que si la historia es buena, mucho mejor, y eso es este film, por lo que, resumiendo, Brotherhood of Blades II: The Infernal Battlefield es una vuelta al cine más clásico, con una historia típica de intrigas de poder, traición, lealtad con tintes románticos y dramáticos, todo ello combinado con secuencias de lucha muy bien coreografiadas y ejecutadas. Una película pausada pero que usar los efectos digitales y avances tecnológicos a favor de la historia, ofreciendo las necesarias dosis de espectacularidad junto a una sensibilidad alejada de la ñoñería y presentada dentro de una historia compacta muy agradecida de ver, un retrato de la Dinastía Ming muy pictórico visualmente, con una estupenda fotografía que convierten, al final, a este film, en una de las recomendadas del año pasado a pesar de la poca repercusión que ha tenido de forma internacional.

NOTA: 7’75

Comentarios