En general, me ha gustado. Es cierto que está muy centrado en un tema concreto como es el racismo, partiendo de la dualidad de Bruce como un chino, pero nacido norteamericano y el racismo de la época en Estados Unidos, algo que se repite tristemente en muchos países, etnia contra etnia. No deja de ser el principal motivo del documental y del director, plasmar todo eso con Bruce como hilo argumental. No aporta nada nuevo sobre él tampoco, pero es agradable de ver, escuchar las declaraciones, las historias, algunas imágenes (otras mil veces vistas, como los vídeos). En el sentido estricto de
documental sobre Bruce Lee, es anecdótico, vemos lo ya visto pero con una buena
edición que entra por el ojo, seas fan o no de Bruce. Sin duda es interesante
escuchar a su viuda e hija, Linda y Shannon, Kareem Abdul-Jabbar, Dan
Inosanto, su hija, e ahijada del Pequeño Dragón, Diana Lee Inosanto, Nancy
Kwan o Andre Morgan. Pero como
decía al principio, es material ya visto para sus seguidores, pero tiene la
segunda lectura, el meollo de la cuestión, un punto de vista de la sociedad estadounidense
en aquellos años en los que Bruce vivía en Oakland, Seattle, el sentir de la
calle ante el racismo imperante contra los chinos y asiáticos y convertirlo así
en un estandarte, un icono reconocible para lanzar ese segundo mensaje humano y
muy personal de Nguyen. Se convierte en una muestra de una reivindicación
social que podríamos llegar a decir, pone de excusa a alguien como Bruce como
llamada de atención. También es una muestra de cariño y respeto de muchos de
los que participan, que de nuevo se repite en los años, cada aniversario
relacionado con su imagen. Un año más nos llega este tipo de celebraciones y en
esta ocasión es bastante recomendable para mantener ese disfrute con la vida de
alguien como fue Bruce y conocer una época determinada de la historia de
Estados Unidos, que puede gustar más o menos. Y llegados a este punto, es
bastante lógico que aparezcan documentales como éste, de buena factura, montaje
ágil y con cierto aumento de conocimientos valorables por cada uno.
A pesar de saberse mucho de su vida, quedan incógnitas aún, teorías y hasta conspiraciones ocultas sobre Bruce Lee, y mucha gente quiere arrojar luz sobre ellas, por lo que es comprensible que quienes llevan tantos años viendo lo mismo, que sientan decepcionados en ese sentido. Un repaso cronológico de su vida con los paralelismos constantes, el típico paseo por lo sabido, visto y oído que te engancha igual que cualquiera de sus películas, si nos las encontramos en emisión. Nada especialmente interesante, pero nada aburrido, que tiene un interés especial en los créditos finales, con imágenes y declaraciones del mayor coleccionista de Bruce Lee, Jeff Ching, un punto y final que eleva el nivel de interés de los estudiosos de la vida y obra del Pequeño Dragón, y termina dejándote un buen sabor de boca, como un refresco de cuando eras pequeño en el pueblo, en verano que tomas años después y recuerdas lo bueno que estaba. Un disfrute ligero pero suficiente con el que alimentar las retinas y refrescar el significado del astro para cada uno, que es quien finalmente tiene la última opinión. Creo que es suficiente para entretenerse la hora y media, o un poquito más, que dura. Un producto de consumo rápido, un bocadito que pegar en momentos casi de relax, y eso sí que lo agradezco al menos.
NOTA: 7,5
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